En un artículo anterior escribimos acerca de fracasar
miserablemente, como nos limitan y sin embargo es parte de la vida.
Aprovechando este especial retomaremos el tema con la
perspectiva del miedo al fracaso.
El miedo al fracaso y ganar a cualquier costa, son dos caras
de la misma moneda. Ser capaz de hacer prácticamente cualquier cosa por ganar o
por no fracasar nos lleva a una dinámica muy dañina, que lamentablemente no nos
hace feliz. El ganar no solo implican los juegos o los deportes, también las
relaciones sociales (obtener al chico o chica deseados), lo laboral y hasta lo
material, como una competencia eterna con el mundo que por más que nos
esforcemos siempre hay alguien mejor y a superar.